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sábado, 28 de febrero de 2015

el lamido


envestido por quien no quiere ser yo
me contravengo
me investigo, me pesquiso y me ignoro
casi todo
me adolezco
investido de quien no quiere ya ser yo
me avizoro y me prevengo
de mí
me transcribo
me traduzco en otra lengua que no entiendo y me silencio
en habla
con la lengua que algo alude y nada lame

sábado, 21 de febrero de 2015

los bárbaros vencen

 a un amigo, para que crea

incendiada ya toda reencarnación
la huida y el bosque no fueron sino un hermoso desatino
es que dios no puede crearnos a cada rato, dijo
pero hay un punto en el espacio al que aún se puede entrar sin odio
y nosotros entramos
el bosque estará oscuro pero habrá claros en el bosque
no hay, debajo de la piel, nada, dijo
que no se augure de este lado del cuero
pero todo se enciende cuando el mito se apaga, dijo
creer en ese centro no es cuestión de largos argumentos
vencen los árboles los bárbaros vencen
...después todo consiste en quedarse
en repasar la historia y encontrarla
de vez en vez
tirada cerca de donde siempre estuvo
aislada de todo
profunda
siempre en un árbol distinto siempre en un árbol del bosque

miércoles, 11 de febrero de 2015

sábado, 7 de febrero de 2015

augurios


como en el pájaro
la pluma es lo último que muere

si alguna vez me encuentro lúcido
espero
tener a mano un lápiz y un papel

viernes, 6 de febrero de 2015

La memoria ajena

a Ricardo Piglia,
que recuerda la memoria de Borges,
que recuerda la de Shakespeare.


Es por eso que me voy a cuidar a los campos
a los pozos que hice
a los pozos que crié.
Es por eso que me voy a reparar en los tanques
en sus pájaros muertos adentro
quizá sin haber podido beber.
Es por eso que me voy a guardar en los sauces
en su sombra reunida o ajena
su vergüenza, su culpa, su timidez.
Me refugio por eso en el monte
en la única vez que fui alga
en la única vez que lloré.
Me voy a volver a la tierra
a la húmeda tierra que hice
o a la ríspida tierra que icé.